El jefe del bloque kirchnerista Agustín Rossi se acerca a saludar muycontento a Ricardo Alfonsín, en plena sesión por el Presupuesto.
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El proyecto fue devuelto a la comisión
Presupuesto: escándalo por denuncias de intento de sobornos
Diputadas de la oposición dicen que recibieron llamadas para irse de la sesión y así facilitarle el trámite al oficialismo.
Presupuesto: escándalo por denuncias de intento de sobornos
Diputadas de la oposición dicen que recibieron llamadas para irse de la sesión y así facilitarle el trámite al oficialismo.
Se cumplían esta madrugada catorce horas ininterrumpidas de sesión cuando el debate por el Presupuesto 2011 en la Cámara de Diputados se transformó en un escándalo de proporciones por las denuncias de dos diputadas opositoras, que dijeron haber recibido ofrecimientos del oficialismo a cambio de facilitar la sanción de la iniciativa. Las denunciantes, la ex macrista Cynthia Hotton, del monobloque Valores Para Mi País, y la radical santacruceña Elsa Álvarez, se negaron sin embargo a revelar los nombres de quiénes se comunicaron con ellas.
El primer indicio surgió de boca de la jefa de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, luego de que la oposición perdiera por apenas cuatro votos una votación propuesta por el Peronismo Federal para pasar a un cuarto intermedio. Eran cerca de las dos de la madrugada y el bloque del PRO concentraba todas las miradas: cinco de sus integrantes, que habían participado del inicio de la sesión, habían desaparecido misteriosamente: Silvia Majdalani, Sol Martínez, Christian Gribaudo, Laura Alonso y Lidia “Pinky” Satragno podrían haber aportado apoyos decisivos para sostener el pedido de cuarto intermedio que hizo Felipe Solá.
“Es la primera vez, en más de dieciséis años como diputada, que voy a pedir una cuestión de privilegio. Los diputados deben poder votar sin presiones, extorsiones ni dinero. Lo que ha sucedido es un escándalo. Diputados que desaparecen. Que negocian afuera de esta Cámara con el señor jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.
Quiero que la comisión de Asuntos Constitucionales investigue”, planteó Carrió.
Inmediatamente el jefe del bloque PRO, Federico Pinedo, recogió el guante. “Hay ausencias que no se pueden explicar”, admitió. Fue allí que Hotton, su ex colega de bancada, pidió la palabra y provocó el primer gran cimbronazo.
“Me han ofrecido algo por teléfono. No voy a mencionar quién, porque a esa persona la valoro. Me dijeron que mis proyectos no son nada al lado de lo que me podían ofrecer”, explicó. Cerca suyo, otras legisladoras opositoras empezaron a gritar el nombre de la vicepresidenta tercera de la Cámara, la kirchnerista Patricia Fadel. Hotton se negó luego a confirmar o desmentir si en su alocución se refirió a la diputada mendocina.
Minutos después, Álvarez expresaba algo parecido: “Yo también he recibido dos llamadas invitándome a retirarme del recinto y, en una de ellas, proponiéndome reunirme con un importante funcionario del Gobierno”, aseguró. Fuentes del radicalismo dejaron trascender que su referencia fue al ministro de Planificación, Julio De Vido. Pero también la diputada santacruceña se negó a dar precisiones sobre el llamado que presuntamente recibió del Gobierno.
Enseguida, fue el jefe de los diputados oficialistas, Agustín Rossi, quien tomó la palabra. “Es una muy mala práctica política que cuando se está por perder una votación se busquen justificativos que nada tienen que ver con la política. Poner un manto de sospecha sobre lo que ha pasado hoy aquí es una farsa”, sostuvo. Confirmó, de todas maneras, haber hablado con diputados opositores. “¿Cómo no lo voy a hacer si estoy tratando de ganar una votación? ¿Cómo no les voy a pedir a los que se fueron que vuelvan?”, preguntó en forma retórica, al explicar la naturaleza de esos contactos.
El primer indicio surgió de boca de la jefa de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, luego de que la oposición perdiera por apenas cuatro votos una votación propuesta por el Peronismo Federal para pasar a un cuarto intermedio. Eran cerca de las dos de la madrugada y el bloque del PRO concentraba todas las miradas: cinco de sus integrantes, que habían participado del inicio de la sesión, habían desaparecido misteriosamente: Silvia Majdalani, Sol Martínez, Christian Gribaudo, Laura Alonso y Lidia “Pinky” Satragno podrían haber aportado apoyos decisivos para sostener el pedido de cuarto intermedio que hizo Felipe Solá.
“Es la primera vez, en más de dieciséis años como diputada, que voy a pedir una cuestión de privilegio. Los diputados deben poder votar sin presiones, extorsiones ni dinero. Lo que ha sucedido es un escándalo. Diputados que desaparecen. Que negocian afuera de esta Cámara con el señor jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.
Quiero que la comisión de Asuntos Constitucionales investigue”, planteó Carrió.
Inmediatamente el jefe del bloque PRO, Federico Pinedo, recogió el guante. “Hay ausencias que no se pueden explicar”, admitió. Fue allí que Hotton, su ex colega de bancada, pidió la palabra y provocó el primer gran cimbronazo.
“Me han ofrecido algo por teléfono. No voy a mencionar quién, porque a esa persona la valoro. Me dijeron que mis proyectos no son nada al lado de lo que me podían ofrecer”, explicó. Cerca suyo, otras legisladoras opositoras empezaron a gritar el nombre de la vicepresidenta tercera de la Cámara, la kirchnerista Patricia Fadel. Hotton se negó luego a confirmar o desmentir si en su alocución se refirió a la diputada mendocina.
Minutos después, Álvarez expresaba algo parecido: “Yo también he recibido dos llamadas invitándome a retirarme del recinto y, en una de ellas, proponiéndome reunirme con un importante funcionario del Gobierno”, aseguró. Fuentes del radicalismo dejaron trascender que su referencia fue al ministro de Planificación, Julio De Vido. Pero también la diputada santacruceña se negó a dar precisiones sobre el llamado que presuntamente recibió del Gobierno.
Enseguida, fue el jefe de los diputados oficialistas, Agustín Rossi, quien tomó la palabra. “Es una muy mala práctica política que cuando se está por perder una votación se busquen justificativos que nada tienen que ver con la política. Poner un manto de sospecha sobre lo que ha pasado hoy aquí es una farsa”, sostuvo. Confirmó, de todas maneras, haber hablado con diputados opositores. “¿Cómo no lo voy a hacer si estoy tratando de ganar una votación? ¿Cómo no les voy a pedir a los que se fueron que vuelvan?”, preguntó en forma retórica, al explicar la naturaleza de esos contactos.
En la UCR:
- Crisis en la UCR: los cobistas denuncian un arreglo de Alfonsín con De Vido - LPO - 11/11/10
En el PRO:
- Coimas en Diputados: Macri convocó de urgencia al bloque y todos apuntan a Laura Alonso - LPO - 11/11/10
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